Iomed, exitoso modelo de gestión de la información clínica
Javier de Oca: «Iomed alcanza el éxito con su modelo de gestión de la información clínica para su investigación».
Javier de Oca, consejero delegado y cofundador de Iomed, explica cómo pretenden facilitar la recabación del volumen de datos necesarios para llevar a cabo estudios clínicos más completos.
Puede parecer repetitivo, pero lo volveremos a decir: las nuevas compañías que quieran establecerse y crecer deben identificar una necesidad actual de la sociedad y atajarla para facilitar su labor. Da igual el sector o a qué nivel contribuyan a mejorar la vida o el trabajo de las personas, si solucionan una necesidad, tienen futuro. El caso de Iomed es exactamente este, facilitar, y además enormemente, la labor de los profesionales de la salud e investigadores del ámbito clínico. “Nuestra misión es colocar a los hospitales que participan con nosotros en la vanguardia de la investigación clínica global. Cambiar el paradigma de la investigación clínica”. Así detalla Javier de Oca, cofundador y consejero delegado de Iomed, la función de su empresa. Puede parecer un objetivo ambicioso y complejo, pero Iomed solo tiene voluntad de simplificar un trabajo esencial: el de la investigación clínica.
“La investigación clínica, en sus muchas formas, se basa en datos”, detalla De Oca. “Los estudios clínicos se hacen con datos de pacientes, datos que, actualmente, suelen estar recogidos en un formato desestructurado”, añade. El cofundador de Iomed lo ilustra de un modo sencillo para que nos hagamos una idea exacta de lo que propone. “Cuando tu vas al médico, este toma notas sobre lo tus síntomas y lo que te pasa, almacenando en el ordenador un cuadro de texto sobre lo que padece el paciente. El problema aquí es que la información recogida no se usa para investigación sino para otros fines, y tiene un valor clave”, dice antes de cerrar concluyendo que Iomed “busca transformar estos datos de texto y estructurarlos en un formato tabulado para su investigación”.
Iomed ofrece para ello dos productos, siendo el llamado Compass el más disruptivo. De Oca explica que este sistema “es lo que instalamos en los hospitales”. A partir de tecnología basada en la Inteligencia Artificial, Compass “lee las historias clínicas de los pacientes y transforma las historias clínicas en lenguaje tabulado. Esto genera una gran base de datos que es del hospital, suya propia, y sobre es base de datos lo que hacemos es construir herramientas para que estos datos se puedan explorar”, añade el directivo de Iomed.
Precisamente, es a partir del Compass y de esta voluntad de construir herramientas para complementar su trabajo de donde nace el segundo producto, llamado Automathic Data Collection. “Es un servicio para extraer de manera automática datos con el fin de participar en un estudio o en un ensayo clínico”, detalla De Oca. Como ejemplo, el consejero delegado de la compañía propone una anécdota. “Ayudamos a varios hospitales españoles a participar en un estudio de Covid-19. Se tuvieron que coger datos de muchos pacientes y para poder capturar todos los datos hubiera hecho falta una mano de obra muy importante para introducir todos los datos a mano. Lo que hicimos, a través de Automathic Data Collection es, a través de una sencilla fórmula, movemos los datos de un paciente a los datos del estudio, agilizando el proceso. Gracias a nosotros, uno de los hospitales generó una muestra de más de 5.000 pacientes para este estudio, algo imposible si lo hacemos a mano”. “De lo que se trata es de generar datos y explotarlos”, concluye De Oca.
Cinco años de experiencia
Tal y como explica De Oca, Iomed nació en 2016, aunque hasta 2017 no empezaron a dedicarle atención plena al proyecto. La idea inicial, cuenta, “era facilitar el uso de la información clínica al hospital”. “Esto es fácil de decir pero difícil de contextualizar”, admite. “Al principio buscábamos modos de hacerlo y lo que hicimos fue reducir nuestro producto. Focalizarnos en aquello que hacíamos mejor, en ir a la base de datos”, añade. Este proceso “llevó un tiempo”, como también lo llevó “entender cómo ganar dinero con esto, qué modelo podía ser rentable, algo difícil en la salud”. “Fue un ejercicio de mucho análisis, de entender el mercado”, argumenta De Oca, que considera que “desde que lo entendimos esto nos ha permitido crecer y vender y arrancar proyectos grandes. Esto nos ha permitido pasar de ser cinco personas a ser una empresa de más de 25 personas”.
Con todo, Iomed gana dinero con un modelo que, según De Oca, “es bien sencillo”. El Compass se vende como producto, es decir, se cobra una cifra por cada hospital que lo quiere, mientras que el Automathic Data Collection es una herramienta gratuita, que se instala sin coste en los hospitales. En este caso, desgrana el directivo, “Iomed sí cobra en el marco de estudios clínicos. Lo que hacemos es presentar un presupuesto contra la financiación de un estudio en concreto. La financiación viene de muchos lugares y nosotros, contra esa financiación, presentamos un presupuesto”.
Fuente: El Economista / Autor: Àlex Soler Fontán / Imagen: El Economista